17 de agosto de 2022
Praedicate evangelium" dice que "cualquier miembro de los fieles" puede dirigir departamentos dentro de la burocracia central de la Iglesia Católica, conocida como la Curia Romana.
Nathalie Becquart de Francia, subsecretaria del Sínodo de los Obispos. (Foto por ROCCO RORANDELLI/ TERRAPROJECT)
Por Xavier Le Normand | FranciaAñadir a tus historias favoritasPublicado el 22 de marzo de 2022.
¿Se harán cargo los laicos del Vaticano?Si bien eso parece un poco exagerado, ahora será posible que "cualquier miembro de los fieles" "preside" uno de los diversos departamentos (conocidos como "dicasterios") de la Curia romana.Al menos esa es la nueva disposición que se encuentra en Praedicate evangelium , la constitución apostólica que el Papa Francisco firmó el 19 de marzo para codificar su reforma de la burocracia central de la Iglesia Católica ubicada en el Vaticano.Cuando el nuevo texto entre en vigor el 5 de junio, ya no se requerirá la ordenación sacerdotal o episcopal para dirigir las instituciones de la Santa Sede.Las constituciones apostólicas anteriores que regulaban la Curia romana estipulaban que los puestos más altos estaban reservados para cardenales y arzobispos.Mientras que los textos anteriores vinculaban el poder de gobierno a la ordenación episcopal, el nuevo especifica que el Romano Pontífice puede nombrar a cualquier persona bautizada (hombre o mujer) para ejercer el "poder vicario".En otras palabras, quien ejerce el poder en la Curia romana lo hace como delegado o vicario del Papa."Un debate muy complejo"El Papa Francisco ha intervenido así con gran autoridad magisterial, dada la naturaleza de una constitución apostólica, con su interpretación de un debate que ha estado ocurriendo durante mucho tiempo dentro de la Iglesia.¿Cuál es la fuente del poder gobernante en la Iglesia? ¿Lo reciben los obispos con su ordenación episcopal o de la misión canónica que han recibido, es decir, del mandato que les ha dado el Papa?"Es un debate muy complejo", dijo Monseñor Patrick Valdrini, un abogado canónico que también es canónigo de San Juan de Letrán.Señaló que la práctica actual no permite una respuesta clara.
El Código de Derecho Canónico promulgado en 1983 por Juan Pablo II no dio una respuesta definitiva a la pregunta.Si bien se afirma que "los que han recibido las órdenes sagradas están capacitados" para la potestad de gobierno, inmediatamente se añade que los laicos pueden "cooperar" en "el ejercicio de esta misma potestad" (canon 129).Un desarrollo de "gran importancia"“Si el poder de gobierno es conferido por la misión canónica, también puede conferirse a los laicos en casos específicos”, dijo el padre jesuita Gianfranco Ghirlanda, un destacado abogado canónico y ex rector de la Pontificia Universidad Gregoriana. Durante la conferencia de presentación del documento, celebrada el lunes 21 de marzo en Roma, el rector emérito resumió:“Si es conferido por el sacramento del orden, los laicos no pueden recibir ningún oficio en la Iglesia que implique el ejercicio del poder de gobierno”, dijo Ghirlanda el 21 de marzo en el lanzamiento de la nueva constitución apostólica en el Vaticano.Señaló, no sin satisfacción, que el Praedicate evangelium "confirma que el poder de gobierno en la Iglesia no proviene del sacramento del orden sagrado, sino de la misión canónica".Ghirlanda lo llamó un desarrollo de "gran importancia".Pero la gran pregunta es si tendrá consecuencias concretas en términos del funcionamiento real de la Curia romana.De hecho, el Papa Francisco ya se desvió de las reglas en 2018 cuando nombró prefecto del Dicasterio para las Comunicaciones al laico italiano Paolo Ruffini.Es un ejemplo que ahora pueden seguir otros, ya que la constitución ahora establece la "competencia" como criterio para el nombramiento.Para ciertos puestos, "las Órdenes Sagradas son esenciales" Del mismo modo, durante varios años el funcionamiento habitual de la Iglesia ha visto a laicos ocupar puestos de gobierno, designados por su obispo, como gerentes de negocios diocesanos.“No hay obstáculo para que esto se haga de manera pragmática”, señaló Mons. Valdrini.Y aunque la práctica existe en los países occidentales, la decisión del Papa podría ser una señal para aquellos países donde casi todas las responsabilidades aún están en manos de los sacerdotes.¿Significa esto que pronto veremos a un laico, hombre o mujer, presidir el Dicasterio para la Doctrina de la Fe? Y en los niveles más inmediatos para los católicos en las bancas, ¿sería posible que un laico dirigiera completamente una parroquia?monseñor Valdrini enfatizó que, sobre todo, es necesario partir de las propias misiones, más que de las habilidades de una persona en particular.“Algunas funciones pueden ser realizadas por un laico, pero para otras son imprescindibles las Órdenes Sagradas”, explicó.Por ejemplo, el papel de párroco lo asume necesariamente un sacerdote, por la centralidad de la celebración de la Eucaristía."A menudo se nombran laicos para suplir la falta de sacerdotes, y solo después se entiende que el papel no requiere las Órdenes Sagradas", continuó el canonista francés con sede en Roma.“Necesitamos tener discusiones que requieran que los abogados canónicos, teólogos y eclesiólogos trabajen juntos”, dijo.
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