Rosemary Radford Ruether .
10 de
agosto 2010.
En 2002, siete mujeres católicas romanas fueron ordenadas
en Austria en el río Danubio por un obispo católico independiente, Rómulo
Antonio Braschi. Más tarde, obispos católicos no identificados ordenaron
algunas de estas mujeres sacerdotes como obispos. Estas mujeres obispos, a su
vez, han ordenado diáconos, sacerdotes y obispos a otras mujeres. De este
principio se ha desarrollado un movimiento, Roman Catholic Womenpriests - RCWP, que afirma que en la actualidad cuenta con cuatro mujeres
obispos y 45 mujeres sacerdotes en los Estados Unidos y otras más en Europa y
Canadá. Este movimiento ha dado forma a una eclesiología reflexiva al definirse
a sí mismo tanto en la sucesión válida de la tradición Católica Romana como también
en la reforma válida, que está reclamando el auténtico discipulado de iguales
de la comunidad primitiva basada en la misión redentora de Cristo (1).
Rechazando
la declaración papal del 28 de mayo de 2008, según la cual las mujeres y los
obispos de sexo masculino que originariamente las habían ordenado estaban "excomulgados
latae sententiae" (automáticamente),
RCWP declaró que "vamos a continuar
sirviendo a nuestra amada Iglesia en un ministerio sacerdotal renovado, que da
la bienvenida a todos a celebrar los sacramentos de manera inclusiva, centradas
en Cristo y facultadas por el Espíritu, en las comunidades
donde quiera que seamos llamadas." RCWP dice tener "sucesión
apostólica", basada en la validez de la ordenación episcopal de su obispo
fundador:
Las ordenaciones de Roman
Catholic Womenpriests son válidas debido a nuestra línea ininterrumpida de
sucesión apostólica en
Es
evidente que el Papa no está de acuerdo con esta opinión. Para él, las mujeres
obispos, sacerdotes y diáconos – así como los obispos originarios – están automáticamente
excomulgados, basado en el hecho de que estas ordenaciones se llevaron a cabo
contra la enseñanza de
Antes de
discutir esta cuestión, veamos un enfoque diferente para la ordenación válida
que ha surgido en una comunidad de fe en San Diego, California, bajo la
dirección de una de las Roman Catholic
Womenpriests, Jane Via. Deseosos de crear y ser parte de una vibrante comunidad
católica que reflejara su visión de lo que esa comunidad debe ser, Via, educadora
en ciencias religiosas y abogada, ha desarrollado, con la ayuda del ex-sacerdote
Rod Stephens,
Desde
hace algunos años, Nancy Corran, una mujer de origen protestante que tiene un título en teología de
Oxford y un Master en Divinidad de
Esta decisión de MMACC ha
causado consternación entre algunos miembros del movimiento RCWP. Algunos incluso han sugerido que
esta acción socava la "sucesión apostólica" de su movimiento. De esto se deduce
la ordenación de Corran quedarían fuera de este linaje de la "sucesión
apostólica". La aparición de esta diferencia provoca candentes
cuestionamientos sobre las bases del concepto de "sucesión
apostólica", que se ha vuelto tan importante para el movimiento RCWP, y en el que basan la validez de
sus propias ordenaciones, a pesar de su repudio por parte del Papa. ¿Por
qué el liderazgo de MMACC siente que
puede pasar esto por alto, a pesar de que Via había sido ordenada en este
movimiento? ¿Qué significa que la "sucesión apostólica" sea la base
de la ordenación válida de sacerdotes por los obispos?
Este
concepto de sucesión apostólica es muy controvertido. Aunque reclamado por el
catolicismo romano, la mayoría de los protestantes, basados en estudios
históricos del cristianismo primitivo, ven esto como una ficción histórica, con
poca base "apostólica" o en el cristianismo del primer siglo. En opinión de los más modernos historiadores de
Según los evangelios, Jesús escogió a 12 discípulos durante su vida. (4) Después de su muerte, uno de ellos, Judas
Iscariote, el traidor de Jesús, fue reemplazado por Matías por la acción
colectiva de los otros 11 discípulos (Hechos 1, 15-26). Pero esos 12 discípulos
han dejado pocos registros de evangelizar gentiles y fundar Iglesias alrededor
del mundo. De hecho, la idea original de los 12 discípulos tenía la intención
de representar a las 12 tribus de Israel, no de conformar un grupo de
fundadores de Iglesias en todo el mundo de la que una sucesión de obispos
descendiera.
El concepto de una Iglesia gentil procedente de todas las naciones se
originó con la misión evangelizadora de Pablo; él no es miembro de los
discípulos originales de Jesús, sino un converso al movimiento cristiano
después de la muerte de Jesús. En la historia de la expansión del cristianismo
fuera de Palestina, los nombres de la mayoría de los 12 discípulos desaparecen.
Los únicos que decían ser relacionados con las zonas fuera de Palestina eran
Pedro, asociado con Antioquía y Roma (a su muerte), y Juan en Éfeso, aunque no
como fundadores de
El concepto de un episcopado monárquico, es decir, Iglesias establecidas
en la ciudad y dirigidas por un obispo con poder jerárquico por encima de los
ancianos (presbíteros) y diáconos, surgió lentamente entre finales del siglo I y
principios del s. III. Ignacio de Antioquía reclamaba para sí miso el
episcopado monárquico en
Varios instrumentos de la ortodoxia surgieron en este período. Uno de
ellos era el canon del Nuevo Testamento, conformado por escritos que se sabe
pertenecen a la más antigua tradición y, por lo tanto, son considerados "apostólicos".
Estos eran vistos como distinguibles de la pluralidad de escritos que circulan
entre las Iglesias y que utilizaban el nombre de los apóstoles – como el
Evangelio de Pedro, los Hechos de Pedro y el Apocalipsis de Pedro, los Hechos
de Andrés y los Hechos de Juan –, pero que se percibían como heréticos en su
contenido. (8) Un linaje histórico de la
enseñanza que se remonta al s. I o principios del s. II, garantizado por una
sucesión de obispos-maestros, fue visto como la validación de esta tradición apostólica.
Estas herramientas surgieron con el fin de separar lo que se define como la
ortodoxia, en contra de la pluralidad de otras tradiciones de carácter más
gnóstico.
En el proceso de definición de esta "tradición apostólica"
contra las "herejías", escritores como Ireneo formularon un argumento
histórico que postula que lo que se perfilaba como la "ortodoxia" a
finales del s. II fue la enseñanza original de Jesús y los apóstoles, mientras
que el varias otras formas de cristianismo más tardías se denunciaron como
desviaciones. Los historiadores modernos, por lo general, han establecido que
la realidad histórica era más bien el opuesto de este esquema. En otras
palabras, muchas variantes del cristianismo eran en realidad anteriores. Lo que
se define como la ortodoxia era una construcción que surgió más tarde. La purga
exitosa de esta diversidad primigenia permite a la ortodoxia emergente reclamar
la originalidad histórica (9).
Un linaje de obispos que desciende de los apóstoles fundadores de Iglesias
principales fue la idea clave en este reclamo emergente de la "enseñanza
apostólica." En esta construcción, los doce discípulos fueron enviados
alrededor del mundo, fundaron Iglesias en las principales ciudades con ellos
mismos como obispos fundadores, e impartieron a cada Iglesia una enseñanza
apostólica que era idéntica. La sucesión de los obispos descendientes de los
fundadores apostólicos llevó esta misma enseñanza, sin cambios, a través de las
generaciones. Este concepto de sucesión apostólica, con sucesiones de
obispo-descendientes de los apóstoles fundadores, tiene poca base en la
realidad histórica de cómo el cristianismo se propago, a pesar de lo útil que
era (y sin duda así se creyó sinceramente) la idea de definir una ortodoxia
emergente para las Iglesias que buscan conformar un frente común en contra de
sus rivales.
Roma fue
un demandante temprano de este papel de garante de la enseñanza apostólica,
aunque, curiosamente, el episcopado monárquico es lento en aparecer allí. En el
s. II,
Un
importante documento que atestigua la tradición de esta Iglesia romana es el de
Hipólito de Roma, un presbítero de origen griego de esta Iglesia que escribió a
principios del s. III un tratado llamado
Los presbíteros y "cualquier obispo que esté presente" da su
consentimiento e impone las manos sobre este líder. Es evidente que lo que se entiende
como el orden en
La noción
de los "apóstoles", es decir, los 12 discípulos elegidos por Jesús,
fundando Iglesias e inaugurando una sucesión de obispos monárquicos, se
convirtió en figura en su forma histórica a finales del s. II y principios del
s. III y aparece como una idea contenida en
Un examen cuidadoso de sus listas para las cuatro Iglesias
principales plantea la cuestión de si algunas de estas fueron fundadas por uno
de los 12 apóstoles. Jerusalén reclama como su fundador a Jacobo
[Santiago], el hermano de Jesús, que no era un discípulo en tiempos de Jesús,
pero se convirtió al cristianismo después de su muerte. Los nombres de 12
líderes judíos de esta Iglesia "de la circuncisión" se afirman desde
la época de Jacobo hasta la destrucción romana de la ciudad en el 139 d.C.,
cuando esta Iglesia desapareció. Pero es difícil imaginar que esta extensa lista represente en
realidad una sucesión de obispos monárquicos, más bien se trata de líderes de
coexisten. Cuando esta Iglesia desapareció en el 139 d.C., una segunda lista de
obispos es reclamada para una Iglesia gentil recién fundada en una ciudad
romana cerca de Jerusalén, pero uno se queda perplejo al preguntarse cómo esta
lista puede ser vista continuación de la línea de Jacobo, el hermano de Jesús.
El linaje de Alejandría no reclama un apóstol fundador pero cita a Marcos,
autor del Evangelio de este nombre, como su fundador. Pero la sucesión de los
obispos de esa ciudad es probable que una construcción posterior, cuando se
impuso poco a poco la ortodoxia contra el anterior gnosticismo. En Antioquía,
"donde los discípulos fueron llamados cristianos por primera vez" (Hch.
11, 26), Pedro se hizo presente, al parecer, en más de una ocasión. Eusebio
afirma que Pedro fue el primer obispo de Antioquía, con Ignacio como su sucesor
en segundo lugar, (13), pero Ignacio mismo
parece no darse cuenta de esto.
Roma, que se convirtió en el modelo para la idea de la sucesión
apostólica, reclama tanto a Pedro como a Pablo como fundadores. Pero sabemos
que
No sólo hay una brecha histórica entre los apóstoles y las listas de obispos
posteriores, sino también, en que este concepto de la sucesión apostólica que
se desarrolló entre finales del s. II y el s. IV, originalmente no tiene nada
que ver con la transmisión del poder sacerdotal de confeccionar
La idea
de la sucesión apostólica como una transmisión del poder Eucarístico de Jesús y
los apóstoles a los obispos es una idea posterior que surge poco a poco para
sustituir el énfasis inicial sobre el linaje de la enseñanza apostólica. Se desarrolla
plenamente sólo en el s. XII cuando el concepto de sacerdocio se define sobre
la base de la facultad de "confeccionar"
¿Cómo
llegó la ordenación a estar relacionada principalmente con el sacerdocio y su
capacidad para "confeccionar"
Irónicamente,
este concepto del s. XII de la sucesión apostólica como la transmisión del
poder de hacer
Entonces, este poder continuará en vigor, incluso si el obispo
ordenante de mujeres es descrito como en “plena comunión con el Papa” a pesar
de haber sido excomulgado por este. Por lo tanto, estar en "comunión" con el
Papa en este contexto no tiene nada que ver con estar de acuerdo con el Papa sobre quién puede ser ordenado, sino más
bien como poseedores de este poder ordenar como un don personal que se puede
transmitir a otras personas por el ejercicio de la acto sacramental de
la ordenación.
Por el
contrario, los líderes de
¿Significa
esto que la comunidad MMACC tiene
“razón” en sus opiniones y el RCWP debe
abandonar sus pretensiones defectuosas de sucesión apostólica? Este no es el punto. Más bien ambos movimientos pueden reconocer sus puntos en
común en que ambos pueden reclamar la validez de sus formas divergentes de
ordenación. Este terreno común reside en una historia y tradición de las
Iglesias cristianas como comunidades de fe ligadas al pasado a través de la
memoria y los constantes e imaginativos esfuerzos para reconstruir lo que es
más vivificante en sus tradiciones y basarse en la reproducción fiel de esta
tradición que da vida. RCWP y MMACC procuran ser “apostólicos” en su
pensamiento y vivir, a través de diferentes versiones, ese proceso.
10 de Agostode 2010, National Catholic Reporter
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