Hace 500 años, nació en Montemolín un extremeño olvidado
Hace 500 años, nacía en Montemolín uno de los extremeños más interesantes de nuestra historia, pero también uno de los más olvidados y menos reconocido. Era hereje y eso por aquí no ha tenido nunca buena prensa. Pero lo suyo fue aún más grave porque era tolerante e incluso equidistante: a veces católico, a veces calvinista, a veces luterano, a veces anglicano.
O eres católico y quemas a los protestantes o eres protestante y quemas a los católicos, pero lo que no se podía hacer entonces, y, metafóricamente, tampoco ahora, ni en Extremadura, ni en España, ni en Europa, era profesar unas ideas y no llevar a la hoguera a quienes profesaban las contrarias.
En este 2020 que empieza, celebramos que en el año 1520 nació en Montemolín Casiodoro de Reina, un gran escritor, un gran traductor, un gran intelectual, un gran teólogo, un gran hombre, un gran extremeño... En su pueblo natal han sabido reconocer su valía adelantándose a los homenajes que recibirá este año. Durante la pasada semana, pudo visitarse en el salón de plenos del Ayuntamiento de Montemolín una exposición de la Biblia del Oso, primera traducción de la Biblia al castellano (la Biblia Políglota de Alcalá está traducida solo al latín) escrita por Casiodoro. Se ha celebrado también una conferencia sobre tan apasionante personaje y se ha dado su nombre a una calle importante que une la carretera con el centro del pueblo.
Es la tercera calle que le dedican en España tras las que tiene en Sevilla y Santi Ponce. En Extremadura, según los callejeros de Internet, hay calles dedicadas al mar Caspio (Cáceres), al Clavel (Badajoz) o al Brezo (Mérida y Plasencia), pero, salvo en su pueblo, Casiodoro no aparece en el callejero. Repito: era hereje y tolerante a la vez, o sea, lo peor. ¿Que escribió la primera traducción de la Biblia al castellano, que es considerado uno de nuestros mejores prosistas, que su vida da para una serie de Netflix de cinco temporadas, que Menéndez Pelayo, que detestaba a los heterodoxos como Casiodoro, afirmó que su Biblia había sido la mayor aportación a la literatura española junto con el Quijote, que Sánchez Ferlosio y Juan Benet lo admiraban? ¡Tonterías! Era un hombre con criterio, denostado y perseguido por católicos y protestantes, huido de Sevilla para no ser quemado por la Inquisición, y de Basilea, escapando de Calvino. ¿Cómo le vamos a dedicar homenajes, reconocimiento y calles los extremeños a un paisano tan excepcional pudiendo dedicársela a la amapola, flor con calle dedicada en Cáceres, Plasencia y Navalmoral de la Mata?
Casiodoro de Reina (Montemolín, 1520-Francfort, 1594) ingresó en el monasterio jerónimo de Santi Ponce (Sevilla). Entra en contacto con el luteranismo y tiene que huir a Ginebra en 1557 antes de que lo abrase el Santo Oficio. Allí habían ejecutado cuatro años antes al español Miguel Servet por disentir del oficialismo calvinista, Casiodoro manifiesta su oposición a la quema de herejes y vuelta a huir antes de que lo abrase Calvino.
Está un tiempo en Francfort, pasa luego por Inglaterra, donde es ordenado pastor de la iglesia anglicana, y empieza a traducir al castellano la Biblia. Su colaborador más cercano, envidioso, lo acusa, entre otras cosas, de homosexualidad extrema y huye a Amberes en 1564, donde vivió hasta que en 1585 las tropas de Felipe II conquistaron la ciudad. Huye de nuevo a Francfort, donde vivía su suegro, abre un comercio de sedas para subsistir y es nombrado pastor de la iglesia luterana. Muere en 1594 y su hijo Marcos lo sucede como pastor.
En medio de tanta huida, publica en 1569 con grandes dificultades la llamada Biblia del Oso por aparecer este animal en la portada. Esta Bibilia era inencontrable hasta que en 1987 la publica Alfaguara. En Francfort se conserva un grabado con su imagen, donde se especifica que nació en Sevilla. No es cierto, nació en Montemolín, era extremeño, aunque aquí pasemos de él y de su obra.
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