JESUS DIJO A LAS MUJERES TAMBIÉN: "HACED ESTO EN MEMORIA MIA"

Sobre qué es el
argumento?

por John Wijngaards

  Lecturas adicionales:
Contact with the sacred?La
Iglesia
 — y aquí me estoy refiriendo expecialmente a la Iglesia
Católica — siempre necesita adaptarse a las circuntancias.
Cien
años atrás, las mujeres tenían una posición
marginal, tanto en la Iglesia como en la sociedad en general. A la mujer no se
le permitía recibir la comunión durante su período
mensual; y después de haber dado a luz tenía que ser ‘purificada’
(=readmitida a la iglesia) antes de poder entrar en una iglesia (*). A las
mujeres se les prohibía estrictamente tocar ‘objetos sagrados’ tales
como el caliz, la patena o el mantel del altar (*). Por supuesto, no
podían distribuir la santa comunión (*). En la iglesia, la mujer
debía tener su cabeza cubierta todo el tiempo (*). La mujer
también estaba excluída de:
— entrar en el santuario
excepto para limpiar (*);
— leer la Sagrada Escriture desde el
púlpito (*);
— predicar (*);
— cantar en el coro de la iglesia
(*);
— servir durante la Misa (*);
— ser plenos miembros de
confraternidades y organizaciones de laicos (*).
Y más importante
que todo: las mujeres estaban excluídas de recibir las Ordenes Sagradas
(*).
 Background music?

Las prohibiciones marcadas con un asterisco
estaban contenidas todavía en el Código de Derecho Canónico
 que fue
promulgado en 1917, y que se mantuvo vigente hasta 1983!

   
En nuestro tiempo ha surgido un nuevo reconocimiento
sobre los derechos humanos: la igualdad básica de hombres y mujeres, y
la necesidad de garantizar igual oportunidad para todos. Debido a esto
también ha empezado a cambiar la actitud de la Iglesia con respecto a la
mujer. Ahora mujeres pueden ser ‘instaladas temporalmente’ para ser lectoras,
servir en la Misa, cantar, predicar, dirigir servicios de oración, ser
ministros de bautismo y de la santa comunión.
Pero la
prohibición de ordenar mujeres sigue en efecto.
 Se han hecho algunas concesiones en
el nuevo Código de Derecho
Canónico
 (1983)
 .
   
Por qué es así?  
   
Teólogos conservadores, bajo la tutela de la
Congregación para la Doctrina de le Fe en Roma, mantienen que si bien
otras restricciones impuestas en el pasado estaban basadas en prejuicios
sociales, la prohibición de ordenar mujeres al sacerdocio es un elemento
incambiable de doctrina Católica. «Jesucristo mismo excluyó a la
mujer del sacerdocio y la Iglesia siempre ha seguido su ejemplo y nunca ha
ordenado mujeres», dicen ellos.
 Lea un sumario de los
argumentos de Roma..
   
Se trata obviamente de una pregunta muy seria. Si las
autoridades en Roma están equivocadas — y con la mayoría de los
teólogos Católicos yo creo que lo están! — se le esta
haciendo un gran daño a la Iglesia al resistir un cambio pastoral que es
esencial para nuestro tiempo.
 Es deber de los
teólogos
 comunicar sus estudios.
   
A muchas personas esto puede parecerle una
cuestión de ‘igualdad’, o una cuestión ‘feminista’, pero no lo
es. Al menos, no lo es primordialmente. Para nosotros los católicos
siempre ha sido crucial determinar la verdadera mente de Cristo y el genuino
significado de la Tradición. La pregunta sobre si la mujer debe o no
debe ser ordenada no puede decidirse por presiones sociales. Debe decidirse
mediante una interpretación cuidadosa de las fuentes. Es verdad que
Jesús personalmente excluyó a las mujeres? Por qué las
mujeres no han sido ordenadas en el pasado? Existen razones teológicas
básicas para excluir a la mujer del orden sagrado? La respuesta a estas
preguntas es lo que debe decidir el resultado del debate.
 Excluir a la mujer del orden sagrado es,
ciertamente, una forma de discriminación si
está basada en los prejuicios de la Iglesia y no en la voluntad de
Cristo . . . !
   
Si bien yo tengo un gran respeto por mis colegas
feministas, yo personalmente no soy un teólogo feminista.
 Examine el origen de
mi investigación.

   
Pues bien,
qué sabemos de Jesucristo?
  
   
What did Jesus have in mind?En los
Evangelios
 se ve claramente que, para Jesús, la mujer y el hombre
son iguales. Ambos ‘entran en el Reino de Dios’ mediante el bautismo, mientras
que en el Antiguo Testamento solo los varones eran circuncidados. Por
qué Jesucristo sólo seleccionó hombres para el grupo de
los doce apóstoles? Probablemente por razones prácticas — por lo
mismo que sólo seleccionó judíos. Sería totalmente
incorrecto inferir que Jesús quiso establecer un norma para todos los
tiempos. Como en otros muchos aspectos, Jesús le dejó a la
Iglesia futura la tarea de establecer los sacramentos.
 La Sagrada
Escritura
 deja abierta la cuestión de la ordenación de
mujeres.
   
Algunas expresiones en las cartas paulinas, tales como
que las mujeres usen velos, se sometan a sus esposos y no hablen en la iglesia,
no pueden interpretarse como una prohibición de ordenarlas.
 No debemos leer en la escritura más de lo
que el autor inspirado intentó
decir
  .
   
En los primeros siglos despues de Cristo, hubo mujeres
que ocuparon ministerios responsables en la Iglesia, incluyendo el diaconado.
La evidencia histórica muestra que en la parte oriental de la Iglesia
Católica hubo mujeres que sirvieron como diáconos hasta el siglo
nueve! Dado que ellas recibían el diaconado mediante una
ordenación plenamente sacramental, idéntica a la de los
diáconos varones, se sigue que, de hecho, hubo mujeres que recibieron el
orden sagrado, lo cual implica que también pueden ser ordenadas al
sacerdocio.
 La historia inédita de las
‘mujeres diáconos’ por si misma es
suficiente para decidir esta cuestión.
   
Entonces, por
qué es que la Iglesia nunca ordenó mujeres al
sacerdocio?
  
   
Hasta muy recientemente en la historia de la Iglesia, un
triple prejuicio bloqueó la aceptación de mujeres como
sacerdotes:
  
Fathers and theologians . . .1. Las mujeres eran consideradas como seres
inferiores. La filosofía griega consideraba que la mujer era ‘un ser
humano incompleto’. Según la ley romana, que fue adoptada por la
Iglesia, las mujeres no podían tener responsabilidades públicas.
Por lo tanto, cómo hubiera sido posible confiarle a la mujer el papel
de liderazgo que implica el sacerdocio?
 Las mujeres eran consideradas
inferior al hombre.
2. Se pensaba que la
mujer estaba sometida a un castigo por el pecado. Se pensaba que la mujer era
responsable por el pecado original, y que era una fuente continua de
seducción. Entoces, como es que semejantes criaturas pecadoras
pudieran ser canales de gracia divina?
 
Se creía que Dios había sometido la mujer al hombre
a consecuencia del pecado original .
3. Se consideraba que
las mujeres eran ritualmente impuras durante su período
mensual.Cómo iba a permitirse que las mujeres desecraran la santidad
de las iglesias, el santuario y especialmente el altar?
 La
menstruación
 se consideraba una desecración
.
   
Debe notarse que estos prejuicios, si bien de origen
cultural, pasaron a ser prejuicios teológicos. Estas fueron las
verdaderas razones por las que se excluyó a la mujer del sacerdocio,
como se ve claro en los escritos de los Padres de la Iglesia, los
cánones de sínodos locales, la ley de la Iglesia y la
teología medieval.
 Estas fuentes se puede
estudiar en detalle
!
   
Todo esto demuestra que la ‘tradición’ de no
ordenar mujeres ha sido una tradición contaminada de prejuicio. La
Tradición eclesial genuina y válida debe estar basada en razones
válidas. Como decía San Cipriano: «Una costumbre errónea
no es mas que un viejo error!» (Cartas 74,9).
 Es necesario distinguir entre
‘TRADICION’ y tradiciones humanas.
   
Si estudiamos cuidadosamente la historia de la Iglesia,
descubrimos una Tradición ‘latente’ y ‘dinámica’ que implica la
posibilidad de ordenar mujeres. Esto significa que los verdaderos
católicos siempre han sabido, en lo íntimo de su corazón,
que ordenar mujeres no va en contra del pensar de Cristo. Así mismo es
que los verdaderos católicos siempre han sabido que la esclavitud
sí va en contra del pensar de Cristo, a pesar de lo que la Iglesia
oficial — Papas, teólogos y leyes eclesiásticas — hayan
enseñado como doctrina católica.
 La verdadera Tradición siempre ha sido
‘latente’, es decir, conservada y
trasmitida implícita e inconscientemente.
Esta Tradición latente se manifestó en
algunos casos, si bien aislados, de ordenar algunas mujeres al sacerdocio; en
la percepción de las funciones ‘sacerdotales’ de María; en la
administración del bautismo y del matrimonio por mujeres; en el
reconocimiento ininterrumpido de la igualdad de hombre y mujer ‘en Cristo’, a
pesar de prácticas y doctrinas oficiales.
 Apenas estamos empezando a descubrir la plenitud
de esta consciencia cristiana.
   
Razones
Teológicas?
  
   
Can only men represent Christ?Los teólogos de Roma aducen que, como Cristo fue
varón, solamente un varón lo puede representar al celebrar la
Eucaristía. Este argumento está basado en la teología
medieval que, como hemos visto, considera a la mujer como ‘un hombre
defectuoso’. Por eso no debe sorprendernos que ellos piensen que solamente un
hombre perfecto — un sacerdote varón — puede representar a Cristo. La
versión moderna de este argumento es igualmente deficiente. Es una
contradicción de la doctrina católica. La mujer también es
imagen de Cristo como hija adoptiva de Dios. En el bautismo y en el matrimonio
la mujer representa plenamente a Cristo. Lo que el sacerdote representa en la
Eucaristía no es el sexo masculino o femenino de Cristo, sino su amor
capaz del sacrificio.
 No har razones válidas para mantener que
una mujer no puede presidir la Eucaristía como
‘otro Cristo’.
   
Doctrina Infalible?
  
   
The end of all discussion?Roma a
contribuído
 a la existente confusión al presumir que la
cuestión ya ha sido decidida ‘infaliblemente’ — no por el Papa, sino
por el llamado ‘magisterio ordinario universal’. Esto se refiere a la autoridad
magisterial colectiva de todos los obispos del mundo. Ellos parecen ser de la
opinión que, dado que los obispos generalmente no ordenan mujeres al
sacerdocio — han habido excepciones! — y dado que los obispos generalmente
han mantenido silencio sobre esta cuestión, esto significa que todos
están de acuerdo.
 El episcopado
entero
 algunas veces ejercita su autoridad de enseñar
infaliblemente.
   
Sin embargo, es bien claro que las condiciones
necesarias para tal ejercicio de autoridad infalible no se han cumplido. Los
obispos deben escuchar la Palabra de Dios y el ‘sensus fidelium’ (lo que
católicos comprometidos sienten ‘en su corazón’ que es verdad).
Los obispos deben ejercitar su autoridad como un cuerpo. Los obispos deben ser
libres de expresar a consciencia sus propias opiniones. Los obispos en conjunto
deben desear que se declare la doctrina como definitiva. Ninguna de estas
condiciones se ha cumplido.
 Los concilios han definido
los límites estrictos de la
infalibilidad
.
   
Así pues,
donde es que estamos?
  
   
La presente tensión que hay en la
Iglesia sobre la ordenación de mujeres no debe preocuparnos
exageradamente. Las crisis y los conflictos son preámbulo de
crecimiento. La Iglesia oficial entrara en razones, como ya lo ha hecho en
tantas otras ocasiones. Pero, mientras esta cuestión no se resuelva, no
podemos ignorar nuestro deber como católicos responsables. Vamos a tener
que levantar nuestra voz — hasta que la voluntad de Cristo se haga realidad
con la ordenación de mujeres en la Iglesia Católica!

https://womenpriests.org/es/

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